Cosas de un parado amancebado: Homenaje a Mike Jacobsen en verano.

lunes, 3 de agosto de 2009

Homenaje a Mike Jacobsen en verano.

Tengo la letra y la tecla, tanto la propia como la ajena, atragantadas en la glotis, por eso nada mejor que vadear el temporal estival (A.K.A: galerna) metiéndome entre Occipital y Frontal una generosa ración de cine mudo de la mejor calidad, un poco de poesía (sin exagerar) y cómics los que haga falta, y para compañar entre pecho y espalda sus buenos volúmenes de gazpacho y su Campari fresquito, que nunca nos falte. Amén.

Las películas, el gazpacho y el Campari los dejamos correr por hoy; pero con respecto a los cómics, que es una palabra que utilizo para referirme a los tebeos, a las viñetas, a las tiras y a los pastiches de arte y ensayo pero nunca para ese bautizo de cretinos llamado "novelas gráficas" porque mi pedantería tiene sus límites y esas "chapitas", esas medallas de la Fnac, no me las cuelgo de motu proprio, les diré que conocí la obra del australiano Mike Jacobsen gracias a Cracked.com.

Desde entonces suelo estar atento cada vez que leo su nombre o reconozco su estilo de dibujo porque sé que me voy a encontrar una viñeta (o viñetas) con abundancia de algunas de las cosas que más gustan en esta casa, como lo es la ternura mezclada con el humor más negro y unas cuantas gotas de horror.

Esta exploración continua de los lugares comunes y del mundo de las fábulas, el cine y los automatismos de la vida cotidiana es un tema muy recurrente, por no decir básico, del humor desde que el mundo es mundo; pero Mike indaga en esa dimensión con una simpatía atroz, una alegría terrible y un desparpajo fuera de lo común. Eso señores, señoras y señoritas se suele llamar talento y el bueno de Mike lo derrocha.

Pueden ver parte de su obra en su página web See Mike Draw, y como muestra les presento algunos de sus chascarrillos y aventuras por el lado más oscuro de los malentendidos. Vamos que nos vamos.